Halloween 2025 está a la vuelta de la esquina y no hay mejor plan que una buena maratón de terror: luces apagadas, algo para picar, y esas series que te dejan mirando la pantalla (y luego el pasillo) sin pestañear. Si lo que buscas este Halloween es vivir una experiencia de terror más larga (y perturbadora), esta nota es para ti.
El terror ha cambiado con los años. Ya no se trata solo de sustos y sangre, sino de atmósferas, silencios, traumas y monstruos que a veces son más humanos que las criaturas que aparecen en pantalla. Por eso armamos una lista con las series de terror más intensas, perturbadoras y adictivas para ver este mes.
Solo te advertimos algo: una vez que empieces, no vas a poder parar.
Them (Prime Video)
Una serie tan intensa que incomoda. Ambientada en los años 50, sigue a una familia afroamericana que se muda a un vecindario donde el racismo y lo sobrenatural se mezclan en una pesadilla constante.

Archive 81 (Netflix)
Un archivista restaura unas cintas VHS y termina atrapado en una historia de sectas, rituales y dimensiones paralelas. Terror moderno con estética vintage.

Hannibal (Prime Video)
Visualmente hermosa y brutal. Explora la relación entre el detective Will Graham y el Dr. Hannibal Lecter, en una historia donde el terror viene disfrazado de arte.

The Outsider (HBO Max)
Basada en la novela de Stephen King, arranca como un caso policial y termina en un relato inquietante sobre el mal en su forma más inexplicable.

The Haunting of Hill House (Netflix)
Una obra maestra del terror moderno. Fantasmas, traumas familiares y una atmósfera tan densa que se queda contigo mucho después del último capítulo.

American Horror Story (Star+)
El terror en todas sus formas. Cada temporada cambia de historia —casas embrujadas, manicomios, brujas, circo— pero mantiene el mismo ADN retorcido que la hace adictiva.

Marianne (Netflix)
Una escritora descubre que los monstruos que creó son reales. Pocas series logran dar miedo de verdad: esta es una de ellas.

The Fall of the House of Usher (Netflix)
La nueva joya de Mike Flanagan, inspirada en los cuentos de Edgar Allan Poe. Oscura, elegante y cargada de tragedia. Perfecta para cerrar la maratón.

