«Todas las familias felices se parecen unas a otras, pero cada familia infeliz lo es a su manera». Lo decía Tolstói al inicio de su obra maestra, Ana Karenina. Un tema que parece reverberar en las familias de todo el mundo, cada una en su propia medida, pero que innegablemente tienen algo en común: los secretos.
“Tiempos Mejores“, la obra escrita por Mikhail Page y Rasec Barragán, dirigida por Roberto Ángeles y ganadora del Estímulo Económico a las Artes Escénicas del Ministerio de Cultura del Perú, ha vuelto con una nueva temporada que te hará inmiscuirte en la vida privada de sus personajes. Y que hará que más de uno piense en sus propias experiencias familiares. Porque como dice el dicho: en todas partes cuecen habas.
Esta vez, sobre las tablas tenemos a una familia de clase media alta compuesta por cuatro integrantes: Andrea (Alicia Mercado), sus padres, María Laura y Antonio (Denisse Dibos y Javier Valdés), y su hermano menor, Leandro (Mario Cortijo). Aparentemente, son una familia unida y feliz, por no mencionar que también exitosa. Después de todo, la hija mayor vive en Estados Unidos junto a su esposo e hijas, María Laura es una abogada de renombre, Antonio un arquitecto multi-pasional, y Leandro un prometedor joven que estudia teatro en Londres.
Sin embargo, no se puede tapar el sol con un dedo y esta familia ideal está a punto de descubrirlo.
Con el motivo del cumpleaños de Leandro, todos deciden conectarse a una reunión en Zoom para celebrarlo junto a él. Desde el inicio es posible ver ciertas rajaduras en las relaciones interpersonales de los personajes. El esfuerzo de Andrea como hermana mayor por propiciar situaciones de unión entre ellos, la hostilidad entre una pareja que no se aguanta más, la liviandad con la que intentan escuchar los problemas de su hija, entre otros. Así pues, la bomba explota cuando Antonio y María Laura anuncian su separación.
Como si se tratase de una grieta en medio de un vidrio, una herida del pasado encuentra su lugar nuevamente en el presente de la familia y decide resurgir para sacudir los cimientos de su unión.
¿Realmente se le puede perdonar todo a la familia?
¿Es la sangre más fuerte que la sensatez y el amor propio?
Las relaciones tóxicas de las que siempre nos hablan, las banderas rojas y las señales que no vemos, no son necesaria y exclusivamente propias de las relaciones amorosas y/o de pareja. Las relaciones familiares también son tóxicas. Pero muchas veces no hacemos nada al respecto, porque la palabra clave que parece justificar los malos tratos, la invasión y la falta de respeto o consideración es precisamente esa: familia.
Bajo tal premisa, y retirando del panorama los típicos malentendidos o diferencias en gustos que se pueden encontrar en los distintos hogares, ¿cuál es la manera de proceder cuando la herida más grande que jamás cicatrizó encuentra su raíz en el abuso y el silencio de quienes debían protegerte?
“Tiempos Mejores” es una obra de teatro, sí. Pero más allá de eso es una realidad que podemos encontrar a diario en nuestra sociedad. Detrás de las sonrisas inmortalizadas en las fotos que se comparten en Facebook o Instagram luego de cada viaje. Es una crítica a nuestro constante intento por mostrar que tenemos una vida perfecta en todo momento. Situación que escapa de las brechas generacionales, ya que no se limita a nuestra imagen en redes sociales.
En su momento, el dramaturgo, Mikhail Page, comentó que “Tiempos Mejores vuelve para poner el foco sobre las relaciones familiares y sus cambios generacionales. […] Los tiempos y cuerpos cambian, pero las cicatrices quedan”.
Para que este espectacular libreto pueda cobrar vida, la obra cuenta con un elenco de lujo que nos acompaña a lo largo de esta montaña rusa emocional: Alicia Mercado, Denisse Dibós, Javier Valdés y Mario Cortijo. Además, está musicalizada en vivo con un piano que demuestra su maestría al recorrer cada una de las escenas y momentos críticos de la obra con la sensibilidad adecuada. A los demás, simples espectadores, solo nos queda ser silenciosos testigos de esta familia a punto de desintegrarse.
Porque si algo nos ha quedado claro es que “Tiempos Mejores” nos pone cara a cara con una realidad que se nos hace difícil aceptar: los árboles familiares también se pueden talar.
La obra está disponible hasta el 1 de diciembre en el Teatro Segura. Entradas disponibles en JOINNUS.