En la música hay artistas que, más allá de su talento y éxito, han cargado con una mochila de críticas y memes que muchas veces no tienen sentido. Desde canciones que se volvieron virales por las razones equivocadas hasta prejuicios injustos por su estilo o fandom, hay nombres que inevitablemente aparecen cuando hablamos de hate gratuito.
Pero ojo: muchos de ellos han sabido darle la vuelta, construir carreras sólidas y hasta reírse del asunto. Aquí repasamos algunos de los casos más icónicos de artistas que recibieron hate y quizá no lo merecían…tanto.
Nickelback
Pocas bandas han sido tan víctimas del hate como Nickelback. Durante los 2000 arrasaron con hits globales como How You Remind Me, Photograph y Rockstar, vendiendo más de 50 millones de discos en todo el mundo. Sin embargo, su sonido rock alternativo, que combinaba letras sencillas con melodías pegajosas, fue tildado de “genérico” y se convirtió en el blanco favorito de memes y chistes en internet. A pesar de todo, el grupo canadiense sigue llenando estadios y sumando millones de reproducciones en plataformas, demostrando que su música aún conecta con un público masivo.
Rebecca Black
Su canción Friday (2011) se viralizó en YouTube y se transformó en uno de los mayores fenómenos de burla digital. La producción amateur, la letra repetitiva y el tono juvenil fueron suficientes para que Rebecca se convirtiera en meme mundial, cargando con críticas crueles siendo apenas una adolescente. Con el tiempo, supo reinventarse y hoy es una artista independiente con un estilo mucho más maduro: pop alternativo con tintes electrónicos que le ha ganado respeto y un público fiel en la escena indie.
Justin Bieber
Justin pasó de ser un adolescente descubierto en YouTube por Scooter Braun y apadrinado por Usher a convertirse en una de las figuras pop más importantes del mundo. En sus primeros años, fue ridiculizado por su imagen juvenil y su base de fans mayoritariamente adolescentes, lo que le generó toneladas de hate gratuito. Con los años, supo evolucionar su sonido con discos como Purpose y Justice, ganando Grammys y colaborando con artistas como Ariana Grande, Ed Sheeran y DJ Khaled. Hoy, pese a los tropiezos de su vida personal, su lugar en la industria está más que consolidado.
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Taylor Swift
Durante mucho tiempo, los chistes y titulares misóginos sobre sus relaciones sentimentales la convirtieron en blanco de burlas. Pero lejos de detenerla, Taylor transformó esas narrativas en canciones que conectaron con millones de fans. Desde Fearless hasta 1989, su evolución del country al pop fue acompañada de récords de ventas, y con The Eras Tour alcanzó un nivel histórico: la gira más taquillera de todos los tiempos. Lo que alguna vez fue hate, hoy es prueba de cómo una artista puede reapropiarse de su historia y usarla como motor creativo.
Imagine Dragons
Con himnos como Radioactive, Demons y Believer, Imagine Dragons se convirtió en una de las bandas más escuchadas del mundo en la última década. Sin embargo, ese mismo éxito masivo generó rechazo entre algunos sectores que los consideran “formulaicos” o demasiado presentes en soundtracks de películas y comerciales. Pese al hate, su impacto es indiscutible: son la banda de rock más reproducida en Spotify y siguen encabezando festivales en todo el mundo.
Coldplay
Una de las bandas más exitosas y queridas del planeta, pero también blanco frecuente de críticas. Algunos los acusan de ser “demasiado comerciales” o de hacer música “demasiado suave”. Sin embargo, con más de 100 millones de discos vendidos, un show en vivo que se ha vuelto experiencia inmersiva (lleno de luces, pulseras LED y visuales) y giras multimillonarias como Music of the Spheres, Coldplay demostró que pueden reinventarse y seguir siendo relevantes después de dos décadas.
Avril Lavigne
Con apenas 17 años, irrumpió en la escena con Complicated y Sk8er Boi, siendo tachada por algunos críticos como un “producto prefabricado”. Pero su autenticidad, estética pop-punk y letras honestas conectaron con toda una generación que la convirtió en ícono de los 2000. Aunque con los años enfrentó rumores absurdos (como la teoría conspirativa de su supuesta “sustitución”), Avril supo mantener su lugar en la música y hoy es considerada pionera e influencia directa de artistas actuales de pop alternativo y punk revival.