Cada 31 de octubre, mientras el mundo se llena de disfraces y calabazas, el Perú vibra al ritmo del cajón, la guitarra y la jarana.
El Día de la Canción Criolla no es solo una fecha en el calendario: es un recordatorio de lo que somos, de esa mezcla de alegría, picardía y sentimiento que solo los peruanos entendemos.
Y aunque los años pasen y las modas cambien, hay algo que no desaparece: la emoción de escuchar un vals criollo, cantar en coro “Contigo Perú” y levantar el vaso con orgullo.

El origen de una celebración muy nuestra
El Día de la Canción Criolla fue instaurado en 1944 por el presidente Manuel Prado, con el propósito de rendir homenaje a la música costeña y a sus intérpretes.
Desde entonces, cada fin de octubre, el país entero se llena de guitarras, cajones y voces que celebran una de las expresiones más auténticas de nuestra identidad.
En barrios, plazas, restaurantes y peñas, la gente se reúne a cantar valses, marineras, polkas y tonderos. Es la noche en que la nostalgia se mezcla con la alegría, y el Perú entero se vuelve una gran jarana.
Las peñas: el corazón del criollismo
Nada representa mejor esta fecha que una buena peña criolla.
Con mesas largas, brindis compartidos y música en vivo, estos espacios mantienen viva la tradición del criollismo, donde la guitarra y el cajón conversan entre sí mientras la voz interpreta historias de amor, desamor y esperanza.
Lo mejor: la energía. Una peña no se mira, se vive. Es imposible no palmear, corear o levantarse a bailar. Lo que no cuaja: si llegas tarde, probablemente no encuentres mesa (así que mejor reserva con anticipación 😉).
Sabor criollo: porque el alma también se alimenta
No hay jarana sin comida.
El Día de la Canción Criolla es también una excusa para saborear lo nuestro: anticuchos, tamales, causa limeña, carapulcra o un buen chicharrón acompañados de una copa de vino o una cerveza helada.
Y si quieres algo más elaborado, muchos restaurantes ofrecen menús temáticos con música en vivo y decoración festiva. Comer, cantar y brindar: la trinidad criolla perfecta.
¿Cómo vivirlo este año?
- Hay muchas formas de celebrar el 31 de octubre:
- En una peña tradicional, rodeado de guitarras y zapateo.
- En un evento cultural con presentaciones de artistas criollos.
- O incluso desde casa, armando tu propia jarana con familiares y amigos.
- La clave está en mantener viva la música, porque cada nota criolla es parte de nuestra historia.
Vive la experiencia en Joinnus
En Joinnus, la tradición se celebra a lo grande:
🎸 Conciertos de música criolla y fusión contemporánea.
🥁 Peñas con artistas locales y nuevas generaciones del criollismo.
🍷 Festivales gastronómicos que combinan música, sabor y cultura peruana.
El Día de la Canción Criolla es más que una celebración: es un abrazo colectivo al alma del Perú. Es recordar que, entre guitarras y cajones, seguimos siendo un pueblo que canta incluso en los momentos más difíciles.
Así que este 31 de octubre, deja que la música te guíe, brinda con los tuyos y canta con el corazón abierto. Porque mientras haya una voz que entone un vals, el espíritu criollo seguirá vivo.
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