El 2020 ha sido un año muy productivo para los jóvenes artistas Ati Lane y Buen Jose, quienes han venido publicando nuevas producciones que han obtenido muy buena recepción en medios nacionales e internacionales. Este año, Buen Jose compartió los videoclips de “Vámonos” y “Nictofobia”, canciones que pertenecen a “Tarde Otra Vez”, el EP que publicó a finales del año pasado. Y por su parte, Ati Lane compartió su segundo EP “Miedo, Amor y Vida”, que llegó acompañado del videoclip de su single “Pieles”.
Ahora, se han juntado para presentarnos “Existo (Mi Universo)”, una balada inusual que usa la distorsión y el jazz como base. Una canción escrita desde lo melódico y lo lírico como un ida y vuelta entre ambos, como si se hicieran preguntas y se dieran las respuestas durante la canción.
“La idea de hacer un tema colaborativo con Ati surge antes de tener idea alguna de cómo sería la canción. Recuerdo que el arreglo que empecé a hacer con la guitarra fue una pequeña búsqueda de un sonido tensionado que suene un poco jazzístico. Esto es algo en lo que recaigo en todas las canciones que compuse luego de lanzar ‘Tarde Otra Vez’. Quise hablar un poco sobre lo que he vivido este año, la forma en que mi manera de vivir, mi día a día dejó de ser el mismo, cuando te preguntas si todo lo que hacías realmente tenía una importancia, si todo lo que hacías y le dabas prioridad puede ser real si no estás ahí tú para materializarlo”, comenta Jose.
A su vez, Ati Lane añade: “Recuerdo mucho los bloqueos creativos que me obligaron a tomar pausas de 1 o 2 semanas, sin embargo, cuando encontraba un momento de calma, me sentaba a escribir ideas, descifrar y reinterpretar el primer verso que Jose escribió; para el segundo verso me basé en dos frases del primer verso que, en mi opinión, son muy poderosas: “Aquí no hay nada, si es que no estoy” y “aunque nos duela, ¿qué importo yo?”, me dió a entender que el personaje dentro de la canción ve su realidad como si se tratara de todo el universo, que a su vez es un espacio que lo aísla y lo captura dentro del egoísmo, aunque una parte de este ser aún es consciente (o entra en estados de lucidez) y sabe que solo es un fragmento de lo que compone toda la realidad.”
La realización de este tema es la mezcla de varios conceptos y formas de ver la canción, por un lado Buen José realizó tanto la ejecución de las guitarras, baterías, y las melodías y letras las hicieron juntos Ati Lane y él. A partir de enviarse mensajes de voz con ideas para la canción se decidió reforzar los suspiros y respiraciones en la grabación. Hacia el final, se agregaron los arreglos de guitarra hechos por Paul C. Young, quien ha trabajado con Buen Jose anteriormente.
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En la realización del videoclip, la intención fue crear una sensación de soledad y nostalgia, como despedirse de un espacio donde se han guardado muchos recuerdos, es por eso que, al momento de elegir el equipo de grabación, decidieron trabajar en analógico para darle un aspecto antiguo e irreal. El videoclip fue grabado enteramente dentro de cassettes de 8 milímetros, el tono cálido e “imperfecto” que le daba a la imagen este tipo de grabación, ayudó mucho a desarrollar el tono “hogareño” que transmitía la locación y la intención de cada una de las escenas. Además de la adición de ciertos “glitches” que ocurrieron en la misma cinta, que lograron cerrar por completo la idea visual.
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