Si creías que Apple ya había mostrado todo lo que podía innovar… piénsalo otra vez. Con el lanzamiento oficial de iOS 26, la marca de la manzana vuelve a sorprender al mundo con una función que parece salida de una película de ciencia ficción: Liquid Glass. ¿Qué es, cómo funciona y por qué todos están hablando de esto?

El iOS 26 llega al público cargado de mejoras visuales, personalización y nuevos gestos, pero el protagonista indiscutible es Liquid Glass, un efecto que transforma por completo la forma en que vemos nuestra pantalla. Literalmente. Este nuevo modo de interfaz crea una sensación de fluidez y transparencia que se adapta al contenido en tiempo real.

Según Apple, la experiencia será más inmersiva, con fondos que “respiran”, íconos que reaccionan al movimiento del teléfono y widgets que parecen flotar bajo una capa líquida. Todo esto usando inteligencia artificial para ajustarse a tu estilo de uso y tus hábitos diarios. O sea, tu iPhone ahora reacciona como si tuviera vida propia.

Y no solo se ve bien. El rendimiento también mejora: iOS 26 reduce el consumo de batería en hasta un 20% y hace que los procesos sean más fluidos. Además, trae nuevas opciones de accesibilidad y privacidad mejoradas para quienes valoran tanto el diseño como el control de sus datos.

¿Lo mejor? El Liquid Glass no estará limitado solo a los últimos modelos. Apple ha confirmado que estará disponible desde el iPhone 11 en adelante, lo que significa que millones de personas podrán vivir esta nueva forma de interactuar con su pantalla sin tener que comprar el modelo más caro.
En resumen, Apple lo hizo otra vez: convirtió algo tan cotidiano como desbloquear el celular en una experiencia visual y sensorial que da gusto usar. Si ya actualizaste, cuéntanos… ¿probaste el Liquid Glass? Y si no, ya sabes lo que toca: ve a configuración y actualiza, porque el futuro ya está en tu mano.
