La vez en que Michael Jackson iba a venir al Perú y lo canceló

En una época en la que Perú no era precisamente reconocido como un destino para los grandes conciertos en Sudamérica, un rumor revolucionó el país: ¡Michael Jackson estaba a punto de aterrizar en suelo peruano para ofrecer un espectáculo inolvidable! La emoción y la incredulidad se apoderaron de todos, mientras el país soñaba despierto con la llegada del legendario “Rey del Pop”.

En medio de la sombra del autogolpe, la guerra contra el terrorismo y la epidemia de cólera que afectaba a varias regiones peruanas, la noticia se propagó como un incendio. Las empresas Pepsico Internacional y Prodin anunciaron con bombos y platillos la visita de Michael Jackson a Lima, tras sus también próximas presentaciones en Brasil, Argentina y Chile.

Lima estalló de alegría. El ícono musical, en la cúspide de su carrera a los 35 años, era aclamado en todas partes del mundo. Su álbum “Dangerous” había conquistado los corazones de millones de fans, y su presentación en el medio tiempo del Super Bowl XXVII seguía fresca en la mente de todos.

La fiebre de Michael Jackson se apoderó de las conversaciones en las calles, en los hogares y en los medios de comunicación. La expectativa era abrumadora y eclipsó por un momento los problemas que aquejaban al país. La gente suspiraba, ahorraba y soñaba con ver a su ídolo en vivo y en directo.

Las entradas, impresas en Suiza con un toque de exclusividad, se convirtieron en el tesoro más codiciado. Con precios que oscilaban entre los 45 y los 320 soles, la venta de boletos se convirtió en una auténtica carrera contrarreloj. Miles de fanáticos lucharon por conseguir su pase para el concierto que prometía hacer historia en Perú.

Michael Jackson iba a venir al Perú…iba…

El día esperado se acercaba. Michael Jackson ya había deslumbrado a sus fanáticos en Argentina y se encontraba en Chile, provocando una euforia sin precedentes. La ilusión se palpaba en el aire, hasta que la noticia cayó como un balde de agua fría: las presentaciones en Santiago de Chile fueron canceladas, excepto una.

El miedo se instaló en el corazón de los peruanos. ¿Correría la misma suerte Lima? La triste realidad se confirmó: el esperado concierto en el Estadio Nacional no se llevaría a cabo. Se rumoreaba que la cancelación se debía a la baja venta de entradas, pues solo se habían vendido 24 mil de las 60 mil disponibles.

La desilusión fue un golpe duro para el país. El escenario preparado con esmero quedó vacío, y las lágrimas de los fanáticos se mezclaron con el eco de las canciones que nunca se interpretarían en suelo peruano.

Michael Jackson, en medio de la polémica que rodeaba su vida personal, canceló definitivamente su gira mundial unas semanas después. Sus palabras resonaron en el corazón de sus seguidores peruanos: “Fui humillado, avergonzado, herido y afectado por un gran dolor en mi corazón”.

Desde entonces, el país quedó marcado con el hecho de que Michael Jackson iba a venir al Perú y no pasó. MJ estuvo tan cerca de brillar en el escenario limeño que quedó como una historia inacabada, un sueño truncado que sigue vivo en el recuerdo de toda una generación.