Hay pelis que llegan como ese mensaje inesperado que no sabías que necesitabas., románticas, suaves y con ese toque de caos emocional que te hace pensar en tu propia vida amorosa.
La nueva historia de Lucy es justamente eso: una montaña rusa de “¿y ahora qué hago?” en pleno Nueva York.
🌆 Amor, señales y un corazón dividido
Lucy es una matchmaker joven, brillante y convencida de que el amor sí se puede predecir. Para ella todo tiene fórmula: química + compatibilidad + buen timing. ¿El problema? La vida siempre viene con plot twist.
Justo cuando parece haber encontrado a “ese” candidato que encaja perfecto en su checklist, aparece… su ex. 😬 Ese ex que no debería mover nada, pero ajá: basta verlo para que todo vuelva a desordenarse.
Y Lucy queda atrapada entre dos caminos: ¿Elegir lo “correcto” o lo que realmente siente? ¿Quedarse con lo perfecto o arriesgarse con lo imperfecto pero real?
💗 Un romance que se siente real
Lo más lindo de esta peli es lo real que se siente. No hay clichés forzados, ni dramas exagerados, ni amor instantáneo de cuento. Hay confusión, dudas, nostalgia, atracción… lo que vivimos todxs cuando el corazón decide no colaborar.
Nueva York sirve como ese escenario donde todo puede pasar: encuentros raros, conversaciones que te cambian el día, momentos torpes que se vuelven tiernos y decisiones que te dejan pensando “¿y si fuera yo?”.
🎬 ¿Por qué deberías verla?
Si te encantan las romcoms que te hacen sonreír, suspirar y reflexionar sin arruinarte la cabeza, esta es para ti. Lucy tiene ese encanto medio torpe y súper auténtico que la vuelve imposible de no querer.
Además, la peli te deja un mensaje bonito: El amor no es una ecuación perfecta… es un pequeño salto al vacío que vale la pena.