Vanesa Martín: «Quiero que la gente se sienta en su versión más auténtica cuando venga a mis conciertos»

Vanesa Martín celebra una nueva etapa en su carrera con Casa Mía, un álbum que refleja libertad, introspección y una conexión más profunda con su público. En este viaje sonoro —donde la artista se atreve a fusionar raíces, emociones y nuevos ritmos—, encontramos a una Vanesa más luminosa, más sincera y más viva que nunca.

A poco de iniciar su gira por Latinoamérica y con el lanzamiento sorpresa de Maldita Mudanza junto a Camilo conquistando corazones, la cantante malagueña nos habla sobre los aprendizajes detrás de este disco, su complicidad con Joaquín Sabina y esa necesidad constante de moverse, buscar y reencontrarse a través de la música.

Aquí nuestra conversación con la artista malagueña sobre esta nueva mudanza emocional (y musical):

¡Bienvenida al Blog Joinnus, Vanesa! A inicios de este año, en enero, conversamos justo antes de que lanzaras Casa Mía. 

¿Cómo ha sido la experiencia hasta ahora con tu último álbum?

[VM] Increíble. La verdad es que ha superado mis expectativas. Casa Mía es un disco que me está llenando de momentos muy poderosos, muy importantes, muy bonitos, muy luminosos. Es un disco muy introspectivo, pero también muy libre, en el que me he permitido muchas licencias, como mezclarme y fusionar mis raíces con otras raíces, de otras culturas y de otros ritmos.

Y yo creo que hemos encontrado una riqueza increíble. La gente está disfrutando un montón, un montón, un montón, la gira. Y nosotros también; se nos pasan las dos horas de concierto volando. Casa Mía es un viaje más que un lugar físico. Es un lugar emocional, un viaje hacia dentro y hacia todo.

Casa Mía es una experiencia en la que conviven muchas emociones, deseos, recuerdos, anhelos… tener la certeza de que hay libertades y no hay pudor, no hay jueces. Hay mucho respeto. Reconocemos nuestra vulnerabilidad como un acto de coraje más que como una debilidad, porque yo creo que reconocerlo ya es un acto de coraje y de fortaleza. Y la verdad, estoy muy contenta. Feliz de haberme atrevido con este disco y de lo que está pasando.

Ahora «Maldita Mudanza» llega con fuerza y justo antes de tu gira. Ya has cantado antes con Camilo en Marbella, ¿cómo fue pasar de ese momentazo a tener por fin un tema propio juntos? 

[VM] Increíble. La verdad es que con Camilo me siento tan cómoda que pareciera que nos conociéramos de toda la vida. Parece que venimos haciendo música desde años atrás, y teníamos ganas desde hacía tiempo de materializar algo. Se ha dado. Hace unos meses coincidimos en Miami y quedamos para tomar algo, conocernos un poco más y charlar un rato. Hablamos de composición, de cómo llevamos la gira, de separarnos de nuestros seres queridos, de pasar tiempo fuera de casa, de esa sensación de búsqueda constante de que hay algo más ahí… llegamos a la conclusión de que somos nómadas indomables. Agarramos la guitarra y surgió esta canción, que nos tiene completamente enamorados a los dos: Maldita Mudanza.

Es una canción íntima, con una composición sencilla, pero que cala y deja huella. ¿Pensaron en cómo querían que se sintieran las personas al escucharla al iniciar la composición o fue algo que fluyó simplemente entre ustedes?

[VM] No, no pensamos en eso. Yo creo que cuando realmente haces música desde tu verdad y desde tu honestidad, tienes que desahogarte y contarlo de la manera más pura que tengas. Y ya. Eso va a conectar con la gente, porque ¿quién no se puede sentir identificado con esta canción? ¿Quién no está en búsqueda constante? ¿Quién no ha dejado su ciudad o su país para buscar algo mejor, creyendo que está en otro sitio? ¿O quién no ha buscado en el amor, y ha tenido la sensación de que ahí ya no era, de que había alguien más esperando por ahí, en alguna parte del mundo?

No sé, yo creo que todos podemos sentirnos así. Yo particularmente creo que todo el mundo puede sentirse identificado con este tema.

Es cierto. Las personas atravesamos por distintas migraciones. Retomando lo que tú mencionaste sobre ser nómadas, esa es la naturaleza del humano. Ser un nómada no solo es sobre dónde ubicarse para residir, sino también emocional y mental. Una siempre está cambiando de lugar. Volviendo a Casa Mía, tú lo mencionaste y yo te lo repito, porque para mí este también es tu disco más libre y diverso. 

Me parece espectacular cómo, a pesar de explorar tantos géneros, sigues sonando a ti misma y que tus fans celebren cada paso que das de innovación. ¿Cómo es la relación con tus fans, en ese aspecto? 

[VM] Qué bien. Qué bien que me digas esto, Jos, porque yo también lo siento así.

Y yo creo que en los conciertos se me nota esa sensación de estar a gusto y plenamente convencida del trabajo que he hecho, disfrutándolo desde la primera canción hasta la última, con todos sus matices. Con mis fans, la gente que me sigue, procuro —y en estos conciertos aún más— interactuar mucho. Es una relación cercana dentro de lo que se puede, lógicamente.

Me gusta mucho, soy muy observadora. Estoy muy pendiente de las caras, de los gestos, de cómo reaccionan ante ciertas canciones. Y te puedo asegurar que, por ejemplo, al día de hoy, en los conciertos todo el mundo se va “sudando la camiseta”. Resulta que al final del show es todo muy potente. Y también, obviamente, hay canciones como Tenemos Universos de Sobra, Me Sucedes o Te Has Perdido Quién Soy, que son más reflexivas, que te invitan a un viaje más interior.

Pero hay una variedad increíble. Es todo muy diverso, muy luminoso, y la gente de verdad se siente como en casa. Yo creo, yo noto que se siente eso desde el título, que resulta ser como una especie de efecto psicomágico, casi una filosofía. Quiero que la gente se sienta en su versión más auténtica cuando venga a los conciertos.

Me encantaría vivir esa experiencia; sobre todo, si vienes a Perú con tu gira.

[VM] Sí, claro que vamos a Perú. Por supuesto.

En este álbum también tienes una canción con Joaquín Sabina. Ya se les ha visto juntos antes. Me gustaría saber, ¿qué significa para ti esta complicidad artística que tienes con él?

[VM] Bueno, la verdad es que Joaquín es un gran amigo desde hace muchos años. Lo considero familia. A Jimena también, limeña, y a todos los amigos. De hecho, tengo muchos amigos de Lima por Joaquín. Y bueno, es un ser tan generoso. Si es grande como artista —inmenso, inspirador, creativo—, a nivel humano es un ser tan noble que me tiene siempre en deuda con él.

Haber podido cantar juntos y tener esta canción los dos es, para mí, un regalo inmenso que me ha hecho la vida.

Ahora que estás en plena gira por España en octubre, comienza su recorrido por Latinoamérica arrancando con México. ¿Qué es lo primero que empacas en la maleta para una gira larga? Y no vale decir tu guitarra.

[VM] Lo primero que empaco para una gira larga es mi ropa interior. Y después, la ropa de los conciertos, y ya después la del día a día. ¡Una tiene que estar bien! (risas)

Para terminar, ¿qué mensaje te gustaría dejarle a tu fan de Latinoamérica que están tachando los días ya para verte?

[VM] Pues que estoy deseando que ojalá estuviéramos más cerca. Ojalá las agendas fueran más fáciles. Ojalá ya hubiéramos visitado Perú con este Casa Mía. Estoy segura de que cuando ese día llegue, vamos a disfrutar un montón.

Gracias por el cariño que recibo, por la complicidad, por esas ganas. Y espero no defraudar. Voy a hacer todo lo posible para poder pronto anunciar la fecha y que vivamos una noche inolvidable y única.

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