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¡Feliz cumpleaños, Quentin Tarantino! Recordando las mejores escenas de sus películas

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Hace muchos años ya que Quentin Jerome Tarantino se consagró como uno de los más influyentes directores en la historia del cine. Su afición por mostrar violencia en pantalla, es tan conocida como su habilidad para crear personajes e historias cautivantes. El también guionista y productor cumple hoy 57 años, y lo homenajeamos con un recuento de algunas de las mejores escenas de cinco de sus películas.

Reservoir Dogs (1994)

Si quieres un crash course de cómo es el estilo de Taratino, empieza viendo su debut como director. Reservoir Dogs cuenta con mucha violencia, referencias a la cultura pop y una narración no lineal. Ocho criminales, desconocidos entre sí, tienen que trabajar juntos para realizar un gran robo de diamantes. Quizá la escena más memorable sea la tortura de Nash (Kirk Baltz), el policía que secuestran, a cargo de Mr. Blonde (Michael Madsen). Más allá de la violencia en sí, lo que perturba es el acompañamiento musical, una canción tan alegre y soleada como “Stuck in the Middle with You“.

Pulp Fiction (1994)

Toda Pulp Fiction está llena de grandes escenas. El conmovedor monólogo del capitán Koons (Christopher Walken), la inyección de adrenalina a Mia luego de una sobredosis, el duelo a la mexicana entre Julius (Samuel L. Jackson), Pumpkin (Tim Roth) y Honey Bunny (Amanda Plummer), la declamación bíblica de Julius… Pero para balancear el gore del resto de la lista, elegimos el concurso de twist. Pocas secuencias de danza se han consagrado en la cultura popular tanto como este baile entre Vincent Vega (John Travolta) y Mia Wallace (Uma Thurman).

Kill Bill: Volume 1 (2003)

Otro de los sellos de Tarantino son los constantes tributos a sus directores favoritos. En el caso de Kill Bill, es evidente el legado de Akira Kurosawa, en especial en la secuencia “Showdown at the House of Blue Leaves”. La Novia (Uma Thurman), entra con su katana a un club nocturno en Tokio y empieza a masacrar a todos los enemigos que encuentra a su paso. Esta no es una pelea normal, es una brutal danza al ritmo de rockabilly japonés. El escenario, la música, la sangre esparcida cual cuadro de Pollock, los gemidos de los caídos… Todo forma una barroca mélange que también dejaría satisfecho a otro ídolo de Tarantino, Federico Fellini.

Inglourious Basterds (2009)

En la vida, por lo general se prefiere dejar lo mejor para el final. Con todo respeto a los fans de Tarantino, el director no lo hizo en Inglourious Basterds. La mejor escena de la película está al inicio, cuando el oficial nazi Hans Landa (Christoph Waltz) llega a la granja de Perrier LaPadite (Denis Ménochet). Esta no sería ni la mitad de brillante sin el dominio que ambos actores tienen de sus expresiones faciales. O sin el contraste de la amplia y soleada campiña francesa con la oscura y claustrofóbica cabaña que parece una mazmorra. O sin los largos y dolorosos silencios de LaPadite, interrumpidos por la zalamera, elegante y cruel parsimonia de Landa. Realmente, esta es la mejor escena de toda la película, y no por nada es la favorita de Tarantino.

Django Unchained (2012)

Cerramos esta breve lista con otra masacre, esta vez situada en el siglo XIX. Luego de dos horas de tensión acumulada, esta finalmente hace catarsis en esta secuencia. Para poder liberar a Broomhilda (Kerry Washington), su esposo Django (Jamie Foxx) y Dr. Schultz (Christoph Waltz) tienen que escuchar el nauseabundo y racista monólogo de Calvin Candie (Leonardo DiCaprio). Sin embargo, el plan se frustra cuando Stephen (Samuel L. Jackson), el esclavo y mano derecha de Candie, se da cuenta que Django y Broomhilda se conocen. Schutz mata a Candie, luego matan a Schutz y Django finalmente deja salir toda su ira y sed de justicia asesinando a casi todos los asistentes.

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Estas son solo algunas de las grandes escenas de la filmografía de Quentin Tarantino. Sin duda, elegir solo cinco escenas ha sido difícil, pero esperamos haberte entretenido recordándote lo buenas que son. ¡Felices 57, Quentin!

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